lunes, 23 de diciembre de 2013

Nahúm: guía de lectura

Antes de comenzar:
¿Cómo sería el mundo si Dios no se enojara con el pecado y los pecadores? ¿Cuál sería nuestro concepto de justicia, rectitud, honestidad, y pertenencia si Dios fuera diferente? ¿Cambiaría nuestros conceptos si abrazaremos otro dios?

Nahúm: guía de lectura
Nineveh era la capital de Asiria cuando Asiria dominaba el medio oriente hasta 612 a.C. cuando Babilonia se rebeló. Nineveh también había colonizado a Babilonia y destruido a Egipto en 662 (Nahúm 3:8-10). Era  una ciudad explotadora y orgullosa. Era la potencia mundial en este periodo de la historia. Esto significa que Nahúm fue escrito entre 663 y 612 c.C.

Nineveh había recibido su primer advertencia del Señor por Jonás alrededor de 772 a.C. Sólo Jonás y Nahúm tienen el tema de Nineveh en el Antiguo Testamento. Jonás tenía la tarea de anunciar juicio contra Nineveh. Ellos respondieron con arrepentimiento y evitaron el desastre para la nación. Pero este cambió de actitud no duro por mucho tiempo y pronto practicaron sus malas costumbres de nuevo. Nahúm es una segunda advertencia para la ciudad de Nineveh.

Israel fue desterrado en 722 a.C., después Isaías (cap. 38 y 39) profetizó en 702 a.C. que Israel había Judá quedaría desterrado debido a su desobediencia y des-lealtad a Dios. En este momento los Judíos estaban dudando de la justicia de Dios. Ellos habían visto la destrucción de Israel. Seguro ellos pensaban: ¿Es Dios justo? o quizá pensaban que ellos  eran más justos que Israel y por eso no habían sido castigados.

¿Cuál es la actitud de Dios ante el pecado? La mayoría piensa que no hay consecuencias por nuestros pecados diarios. Muchos llegan a la conclusión de que el pecado no es importante en la vida. Piensan que el robo, la conducta sexual inapropiada, blasfemia, desobedecía, mentira no tienen consecuencia si no se es  atrapado y probado culpable . Sin embargo la Biblia nos enseña que todo pecado tiene consecuencia aun cuando no las vemos.

Muchas veces el problema es que no nos vemos como culpables, o muchas veces vemos que otras personas son más malas que nosotros y no sufren ninguna consecuencia de su maldad.


Autor
La única información que tenemos acerca de Nahúm está en este libro. No es mencionado en ninguna otra parte de la Biblia.

Nahúm esta desarrollando la promesa hecha a Abraham en Génesis 12:2-3:
“»Haré de ti una nación grande, y te bendeciré;
haré famoso tu nombre, y serás una bendición.
Bendeciré a los que te bendigan y maldeciré a los que te maldigan;
¡por medio de ti serán bendecidas todas las familias de la tierra!»

Los Asirios habían maldecido a los Israelitas y a los Judíos por dos siglos. Los habían peleado y esclavizado y desterrado. Asiria también estaba en el cumbre de su poder cuando Nahúm hizo esta profecía.  Así Nahúm está comentando la promesa y sabe el futuro de Nineveh. Nineveh fue destruido por haber “maldecido” a Israel y Judá. La gente hoy también será destruida por su actitud ante Jesús, el pueblo de Dios.

La idea de que Dios es un “conquistador” que pelea a favor de su pueblo es constante en la Biblia. Ésta idea va formando la idea del Mesías o Cristo. Nahúm describe como Dios cumple sus promesas a Abraham, de maldecir a los que maldicen el descendiente de Abraham. Dios derrota por completo a sus enemigos. Cuando el Señor destruye a sus enemigos hay buenas noticias. Los pies de los que portan estas buenas nuevas están bendecidos. (Los profetas tienen diferentes perspectivas sobre la obra de Dios: Nahúm, la derrota de las personas que son enemigos de Dios y Isaías, la victoria sobre el mal).

Nahúm escribe su libro cuando Nineveh cuando Judea era oprimido por Asiria (ver 2 Reyes 17-23 y 2 Crónicas 33-34). Entre la derrota de los egipcios en 663 a.C. (Nahúm 3:8) y la revuelta de lo caldeos en 612 a.C., Nineveh era el imperio más potente que existía en el medio oriente. Como país conquistador Asiria era conocido como el más violento. En este tiempo los reyes Manases y Josías eran titirés de Asiria. Nahúm da la perspectiva de Dios sobre el orgullo desmedida de los Asirios.

Bosquejo de Nahúm
1:         Titulo
1:2-8         Himno al Señor
1:9-15     Un anuncio de juicio y salvación
2:1-3:19     Detalles de la caída de Nineveh

1:1 Titulo
El título indica el tema del libro. Indica que era una “visión” y que Nahúm era de Elcós (una ciudad que no hemos podido identificar con certeza).

1:2-12 el Himno del Señor
Dios es el guerrero soberano del universo (1:2-6). El gana la guerra santa contra sus enemigos.

Este tema es como un credo o declaración acerca de Dios. El autor nos enseña que somos responsables del pecado.

La soberanía de Dios impacta la vida humana (1:7-8)

La ira soberana actúa contra el rey de Asiria (1:9-11)

Dos sentencias: Judá y Asiria (1:12-2:2)
Nahúm predice el final de la opresión de los Asirios.
El fin de la dinastía

Buenas noticias
Preparase para la batalla

El resultado final de la derrota de Judea resultará en  la restauración de la devoción sin ídolos  en el futuro. Esto es la preparación para el Mesías.

La descripción de la derrota (2:3-10)
El ataque (2:3-5)
La derrota (2:6-10)
El león destruido (2:11-13)

Ay de Nineveh (3:1-19)
El capítulo 3 esta dedicado a la descripción de la caída de Nineveh.

El “ay” es una indicación de que la ciudad será castigada y ya esta muerta.

La vergüenza de la prostituta
La ciudad es comparada a una prostituta que fue abandonada desnuda dandole pena ajena a las personas que la ven. De la misma manera la ciudad orgullosa ha perdido su esplendor.

Conclusiones
A. La ira de Dios
La ira de Dios no es sólo un tema de Nahúm, ni el Antiguo Testamento. También se enfatiza en el Nuevo.  Aquí hay algunos ejemplos: Romanos 1:18-32, Mateo 7:21-27, Marcos 11:15-17, Apocalipsis 2 y 3, Apocalipsis 6:9-15, Apocalipsis 14 la uvas de la ira del Señor.

Reflexión:
Enemigos de Dios
Un concepto que se repite en el libro de Nahúm es que Dios es enemigo de ciertas personas en general y de los asirios en particular. ¿Cuáles son los rasgos de los enemigos de Dios? ¿Qué hacen o dicen?

Una segunda perspectiva es ver como Dios trata sus enemigos y luego pregunta si existen esas condiciones en el mundo hoy. ¿Estaría enojado Dios con nosotros hoy? ¿Qué podemos hacer para reconciliarnos con Dios?

¿Qué hace Dios con sus enemigos? ¿Cuál es su destino?

Después de leer Nahúm, tenemos que preguntar: ¿Por qué algunos países del mundo están perdiendo su población. Por ejemplo, en Japón se vende más pañales para adultos que para bebes y en Europa la población se esta disminuyendo.

Otro fenómeno es la situación del matrimonio. Los jóvenes de hoy se casan a una edad mayor o optan por no casarse. Ya algunos están uniendo en un matrimonio con los de su propio sexo. Esto ya es legal un algunos estados y países. Obviamente tiene consecuencia en el número de niños en el mundo.

También tenemos el fenómeno del calentamiento global que dicen que va a perjudicar la población humana en el mundo.

Aquí en Nahúm estas cosas son manifestaciones de la ira de Dios contra los de Nineveh. ¿Podría ser que Dios está manifestando su ira contra nosotros y nuestra creciente ignorancia de Dios?

Bibliografía:
Mike Butterworth, “Nahúm” en D.A. Carson, et. al. Nuevo comentario bíblico siglo xxi, Casa Bautista.
Gordon Fee y Douglas Stuart, Como leer la Biblia, libro por libro, Vida.
José Grau, La ira de Dios: el mensaje de Nahúm, Andamio,1999.
Derek Kidner, Nahum, Habakkuk Zephaniah, IVP.
Edward J. Young, “Nahúm”, en Douglas J. D. Nuevo Diccionario Bíblico, Certeza.


viernes, 13 de diciembre de 2013

La importancia de "lector implicito" para la interpretación


El destinatario
Estaba escuchando a un profesor de literatura hablar de cómo interpretar la Biblia. Me impactó mucho lo que dijo del “lector implícito” o el destinatario. Los autores de la Biblia tenían una cultura común con sus lectores. Ambos sabían el mismo idioma, sabían la misma gramática, vivían en la misma situación. Lo que el autor escribía responde a esta situación. Nosotros para interpretarlo correctamente tenemos que reconstruir la situación, tenemos que concretizar el “lector implícito”. Esto es la única manera que podemos aproximarnos al sentido original.   Pondré mis observaciones de las implicaciones aquí:

También hoy cuando hablamos de otras culturas grupos estamos entrando a “otros mundos”.  Estaba escuchando el informe del accidente de avión de Corea en San Francisco en 2013. La investigación mencionó varias causas del accidente: (1) el piloto no usó lentes para el sol porque se considera falta de cortesía, por lo que no pudo ver la pista de aterrizaje, (2) como el piloto era la “autoridad”, no podría recibir sugerencias de sus subordinados. La autoridad en Corea es muy vertical. No depende de otros. Si no conocemos la cultura de la gente, no podemos hablar con ellos de manera eficaz. Los manuales de cómo conducir los aviones que no toman en cuenta la cultura de los pilotos no funcionan para mantener los aviones en el aire.

Todo autor le escribe a una persona. Muchas veces nosotros no la conocemos, y no escribe a nosotros. El destinatario o “lector implícito” vivió en otro tiempo, otra cultura, con otro sistema de gobierno y con otra forma de adorar a Dios. La lista de diferencias es muy larga y podemos continuar la lista para incluir tecnología, comunicaciones, satélites, transporte, motores, etc.

Desde el principio del tiempo, hasta los tiempos de Napoleón el transporte más rápido era el caballo. La mayoría no tenía más que caminar. Era un mundo donde todo el calor provenía del fuego y no había electricidad.

También la información disponible al hombre era reducida comparada con lo que existe hoy. La única manera plasmar la comunicación era por escrito. Antes de 1450 no había imprenta. Por el año 1000 el hombre empezaba a usar anteojos. La lectura antes de San Agustín era en voz alta. Pablo escribía sus cartas para ser leídas en voz alta en las iglesias. Solo los muy ricos tenían libros en sus casas.

Así vemos que la Biblia estaba escrita para “otro mundo”. Pero también hay muchos cambios aun en los destinatarios dentro de la misma Biblia. Unos vivían antes de los “Diez Mandamientos” y otros eran polígamos.

Si esta tan importante tomar en cuenta la diferencia cultural en el mundo hoy, también es importante tomar en cuenta las diferencias culturales entre nosotros y los mencionados en la Biblia.

Otro factor es que el significado cambia con el destinatario. La frase “te amo” cambia mucho en el sentido depende quien está hablando a quien. Por ejemplo, si una madre lo dice a su hijo, y si un hijo lo diga a su madre.  Si el novia lo dice a su novio, o lo dice a su padre. El sentido cambia con el cambio de receptor.

Lo mismo pasa en la Biblia. Para hacer una interpretación correcta tenemos que conocer bien a quién le habla el autor. Si no lo sabemos, vamos a equivocarnos en la interpretación.

No es posible interpretar a los autores de la Biblia con las herramientas interpretación posmodernas porque cada autor escribió  a una audiencia específica. Los judíos tienen normas que rigen como se escribe y como se interpreta los texto. Si uno no interpreta el escrito en este contexto, no lo va a comprender y asì cambiará su interpretación del texto. Tendríamos que inventar el significado del texto y no tendría nada ver con la intención original de la obra. 

Los profetas jamás eran los representantes de los poderosos. Hebreos dice que todos fueron martirizados por su mensaje. Los autores del Nuevo Testamento no eran los poderosos, sino un minoría que expresaba su fe siendo perseguidos por judíos que rechazaron la divinidad de Jesús o por un culto al estado que decía que Cesar fuera un dios. La Biblia no fue escrita por vencedores. 

El importancia del “lector implícito” en la interpretación significa que no podemos juntar pasajes bíblicos sin destruir el mensaje. El documento esta escrito para un destinatario especifico. Si interpretamos el pasaje como si fuéramos el destinatario sin tomar en cuenta su intención original no podemos comprender lo que la Biblia dice.

Cuando hacemos una interpretación desde una postura predefinida “La Biblia habla a los oprimidos”, “la Biblia para los jóvenes”, “la Biblia para la mujer de hoy“, etc. , estamos importando un “nuevo destinatario” que el autor no tenía en mente. Esto es eisegesis (importar significado que tenemos nosotros) y no exegesis (sacar el significado o exponer el mensaje del autor) y no podemos llegar a entender el mensaje original.

Nuestros escritos y charlas tienen que tener una audiencia especifica para ser efectivos. Si no lo hacemos así, habrá más accidentes como la caída del avión por falta de una comunicación adecuada. Nuestros manuales para entrenar personas tienen que estar escritos con personas especificas en mente. Pero también tenemos que leer con la misma idea en mente.

Conclusión
1.     Si no hacemos un esfuerzo para conocer el contexto del autor y el “lector implícito” no podemos asegurar nuestra comprensión del mensaje, sólo cuando conocemos tanto el autor y su mensaje, como el “lector implícito” o destinatario original podemos entender el mensaje como fue dado.

2.     Cuando uno comparte sobre un tema usando textos de varios libros de la Biblia aumenta la posibilidad de error por tomar autores distintos, con propósitos diversos y destinatarios variados. Este tipo de presentación requiere mucho más estudio.

 Bibliografía
Gerald Nyenhuis, Hermeneutica, Geraldnyenhuis.org